365 Días con Santa Faustina
Reflexión 27: Pruebas transformadas en virtud
A veces Dios nos impone pruebas. Esto se hace por amor para fortalecernos y profundizar nuestro amor por Él. Mira qué es lo que experimentas como prueba. Pregúntale a Dios si esto es de Él y qué bien quiere sacar de esa prueba. Las pruebas siempre tienen el potencial de hacernos más fuertes. Si estás experimentando una cierta prueba interior en la vida, debes saber que es en este momento, más que en ningún otro, que Dios quiere que renueves tu confianza en Él. Hazlo aunque no tengas ganas de hacerlo. Las pruebas son la mayor oportunidad para que nuestra fe, esperanza y amor crezcan (Ver Diario #24).
¿Cuál es tu mayor prueba en este momento? Identifique lo que sea que pueda ser y sepa que Jesús entiende. Reflexiona sobre Él viniendo a Ti en este momento, abrazando esta prueba contigo y en ti. Su fuerza es perfecta y Él te guiará a través de todas las cosas. En el proceso, Él te llenará de mayor fe, esperanza y amor.
Señor, sé que mis pruebas en la vida son una gracia. Puede que no lo parezcan en el momento en que los soporto, pero lo son. Ayúdame especialmente con (indica tu intención actual). Te entrego esta situación y te agradezco por tu perfecto amor y fortaleza. Jesús, en Ti confío.
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