domingo, 31 de octubre de 2021

De ellos es el Reino de los cielos

  

De ellos es el Reino de los cielos

Lunes 1 de noviembre

Todos Santos

¡Paz y Bien!Evangelio

Mateo 5, 1-12

En aquel tiempo, cuando Jesús vio a la muchedumbre, subió al monte y se sentó. Entonces se le acercaron sus discípulos. Enseguida comenzó a enseñarles, hablándoles así:

"Dichosos los pobres de espíritu,

porque de ellos es el Reino de los cielos.

Dichosos los que lloran,

porque serán consolados.

Dichosos los sufridos,

porque heredarán la tierra.

Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia,

porque serán saciados.

Dichosos los misericordiosos,

porque obtendrán misericordia.

Dichosos los limpios de corazón,

porque verán a Dios.

Dichosos los que trabajan por la paz,

porque se les llamará hijos de Dios.

Dichosos los perseguidos por causa de la justicia,

porque de ellos es el Reino de los cielos.

Dichosos serán ustedes, cuando los injurien, los persigan y digan cosas falsas de ustedes por causa mía. Alégrense y salten de contento, porque su premio será grande en los cielos, puesto que de la misma manera persiguieron a los profetas que vivieron antes que ustedes".

Palabra del Señor

Reflexión

San Mateo ha querido presentar esta enseñanza de Jesús en una gran catequesis, para que ésta sea para los cristianos, lo que fue para los judíos la ley: norma de vida. Por ello nos presenta a Jesús que, como Moisés, sube al "monte" y desde ahí instruye al pueblo. La catequesis empieza con la palabra "Bienaventurados" que puede ser también traducida como "Feliz" o "Dichoso" o quizás como las tres juntas.

La palabra en griego "macario" significa una alegría profunda e interior que está relacionada con la paz y el gozo. Con esta interpretación resulta paradójico, de acuerdo a los criterios humanos decir: "felices los que lloran, felices los pobres, felices los mansos, felices los perseguidos por ser cristianos", sin embargo, esta es una realidad auténtica, pues la verdadera felicidad, el gozo, la alegría, no están donde el mundo nos las propone, sino en donde Jesús nos lo dice: "Sólo en él", llevando una vida auténticamente cristiana.

La felicidad que encontramos en el mundo es pasajera, la que nos ofrece Jesús y su Evangelio es total, duradera y definitiva. Si verdaderamente quieres ser un "macario", un lleno de la alegría, la paz y el gozo de Dios, esfuérzate todos los días por vivir de acuerdo al Evangelio.

¡Feliz Lunes!

Fr. Arturo Ríos Lara, ofm

Compartir en Cristo - TODOS LOS SANTOS (1 noviembre 2021)

 


TODOS LOS SANTOS (1 noviembre 2021)
Publicado el domingo, 31 octubre 2021| Comentarios desactivadosen TODOS LOS SANTOS (1 noviembre 2021)
De Corazón a corazón: Ap 7,2-4.9-14 (“Una enorme muchedumbre de todas las naciones… vestidos con túnicas blancas”); 1Jn 3,1-3 (“Somos hijos de Dios… seremos semejantes a él porque lo veremos tal como es”); Mt 5,1-12 (“Bienaventurados los pobres… afligidos… mansos… misericordiosos… de ellos es el Reino de los cielos”)

Contemplación, vivencia, fraternidad, misión: “Las bienaventuranzas dibujan el rostro de Jesucristo y describen su caridad; expresan la vocación de los fieles asociados a la gloria de su Pasión y de su resurrección" (Catecismo, n.1717). Todos estamos llamados a ser “santos”, reflejo de la realidad de Dios Amor, el “Santo”, que sostiene nuestro existir con los latidos de su corazón paterno. La vida es un reto, a modo de ensayo maravilloso, para hacerse “semejantes” a quien nos ha creado por amor. En Cristo podemos “blanquear” nuestras túnicas, para participar de su misma filiación. El proceso es el de compartir libremente su mismo estilo de vida y de no anteponer nada al amor. “La santidad es el rostro más bello de la Iglesia” (Gaudete et exsultate, n.9).

*Todos hermanos, somos signo de esperanza con la Madre de Jesús: María es la “Reina de todos los santos”, “ella vivió como nadie las bienaventuranzas de Jesús. Ella es la que se estremecía de gozo en la presencia de Dios, la que conservaba todo en su corazón y se dejó atravesar por la espada” (Gaudete et exsultate, n.176).



Liturgia de la Palabra:


Liturgia de la Palabra:

01/11/2021
Lunes de la trigesimoprimera semana de Tiempo Ordinario. Todos los Santos.
PRIMERA LECTURA
Vi una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de todas las naciones, razas, pueblos y lenguas.
Lectura del libro del Apocalipsis 7, 2-4. 9-14
Yo, Juan, vi a otro ángel que subía del oriente llevando el sello del Dios vivo. Gritó con voz potente a los cuatro ángeles encargados de dañar a la tierra y al mar, diciéndoles:
«No dañéis a la tierra ni al mar ni a los árboles hasta que sellemos en la frente a los siervos de nuestro Dios».
Oí también el número de los sellados, ciento cuarenta y cuatro mil, de todas las tribus de Israel.
Después de esto vi una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de todas naciones, razas, pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos. Y gritan con voz potente:
«¡La victoria es de nuestro Dios, que está sentado en el trono, y del Cordero!».
Y todos los ángeles que estaban de pie alrededor del trono y de los ancianos y de los cuatro vivientes cayeron rostro a tierra ante el trono, y adoraron a Dios, diciendo:
«Amén. La alabanza y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y el honor y el poder y la fuerza son de nuestro Dios, por los siglos de los siglos. Amén».
Y uno de los ancianos me dijo:
«Estos que están vestidos con vestiduras blancas ¿quiénes son y de dónde han venido?».
Yo le respondí:
«Señor mío, tú lo sabrás».
Él me respondió.
«Estos son los que vienen de la gran tribulación: han lavado y blanqueado sus vestiduras en la sangre del Cordero».
Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIAL 23, 1-2. 3-4ab. 5-6
R. Esta es la generación que busca tu rostro, Señor.
Del Señor es la tierra y cuanto la llena,
el orbe y todos sus habitantes:
él la fundó sobre los mares,
él la afianzó sobre los ríos. R.
¿Quién puede subir al monte del Señor?
¿Quién puede estar en el recinto sacro?
El hombre de manos inocentes y puro corazón,
que no confía en los ídolos. R.
Ese recibirá la bendición del Señor,
le hará justicia el Dios de salvación.
Esta es la generación que busca al Señor,
que busca tu rostro, Dios de Jacob. R.

SEGUNDA LECTURA
Veremos a Dios tal cual es.
Lectura de la primera carta del apóstol san Juan 3, 1-3
Queridos hermanos:
Mirad qué amor nos ha tenido el Padre para llamarnos hijos de Dios, pues ¡lo somos! El mundo no nos conoce porque no lo conoció a él.
Queridos, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que seremos. Sabemos que, cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque lo veremos tal cual es.
Todo el que tiene esperanza en él se purifica a sí mismo, como él es puro.
Palabra de Dios.

Aleluya Mt 11, 28
R. Aleluya, aleluya, aleluya.
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados - dice el Señor -,
y yo os aliviaré. R.

EVANGELIO
Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo.
Lectura del santo Evangelio según san Mateo 5, 1-12a
En aquel tiempo, al ver Jesús el gentío, subió al monte, se sentó y se acercaron sus discípulos; y, abriendo su boca, les enseñaba diciendo:
«Bienaventurados los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
Bienaventurados los mansos, porque ellos heredarán la tierra.
Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.
Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos quedarán saciados.
Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.
Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
Bienaventurados vosotros cuando os insulten y os persigan y os calumnien de cualquier modo por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo».
Palabra del Señor.
 

Liturgia de las horas P. Paco Rebollo SIERVOS DEL DIVINO AMOR. OFICIO DE LECTURA, LAUDES, HORAS INTERMEDIAS, VÍSPERAS Y COMPLETAS. - 1 DE NOVIEMBRE LUNES XXXI DEL T. ORDINARIO SOLEMNIDAD DE TODOS LOS SANTOS




De la Solemnidad

 

TODOS LOS SANTOS. (SOLEMNIDAD)

 

OFICIO DE LECTURA

 

Si el Oficio de Lectura es la primera oración del día:

 

V. Señor abre mis labios

R. Y mi boca proclamará tu alabanza

 

Se añade el Salmo del Invitatorio con la siguiente antífona:

 

Ant. Venid, adoremos al Señor, a quien glorifica la asamblea de los santos.

 

 

Salmo 94 INVITACIÓN A LA ALABANZA DIVINA

 

Venid, aclamemos al Señor,

demos vítores a la Roca que nos salva;

entremos a su presencia dándole gracias,

aclamándolo con cantos.

 

Porque el Señor es un Dios grande,

soberano de todos los dioses:

tiene en su mano las simas de la tierra,

son suyas las cumbres de los montes;

suyo es el mar, porque él lo hizo,

la tierra firme que modelaron sus manos.

 

Venid, postrémonos por tierra,

bendiciendo al Señor, creador nuestro.

Porque él es nuestro Dios,

y nosotros su pueblo,

el rebaño que él guía.

 

Ojalá escuchéis hoy su voz:

«No endurezcáis el corazón como en Meribá,

como el día de Masá en el desierto;

cuando vuestros padres me pusieron a prueba

y dudaron de mí, aunque habían visto mis obras.

 

Durante cuarenta años

aquella generación me repugnó, y dije:

Es un pueblo de corazón extraviado,

que no reconoce mi camino;

por eso he jurado en mi cólera

que no entrarán en mi descanso»

 

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.

Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

 

Si antes del Oficio de lectura se ha rezado ya alguna otra Hora:

 

V. Dios mío, ven en mi auxilio

R. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.

Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya.

 

 

Himno: NACIDOS DEL AMOR PARA LA VIDA

 

Nacidos del amor para la vida,

vivieron un amor nunca acabado,

murieron un amor crucificado

en una carne débil no abatida.

 

Hirieron con la sangre de su herida

el animal salvaje del pecado,

floreció su bautismo en el Amado

con una santidad comprometida.

 

Hombres como nosotros, compañeros

del silencio extasiado o de la guerra,

en la fatiga de todos los senderos.

 

Danos, Padre, gozar su compañía,

ser testigos del cielo aquí en la tierra

y, como ellos, vivir en agonía. Amén.

 

SALMODIA

MISAL DIARIO PALABRA DE DIOS. LECTURAS DEL LUNES XXXI DEL T. ORDINARIO 1 DE NOVIEMBRE SOLEMNIDAD DE TODOS LOS SANTOS (BLANCO)

 Dichosos serán ustedes cuando los injurien, los persigan y digan cosas falsas de ustedes por causa mía.







ANTÍFONA DE ENTRADA

Alegrémonos en el Señor y alabemos al Hijo de Dios, junto con los ángeles, al celebrar hoy esta solemnidad de Todos los Santos.

Se dice Gloria.

ORACIÓN COLECTA

Dios todopoderoso y eterno, que nos concedes venerar los méritos de todos tus santos en una sola fiesta, te rogamos, por las súplicas de tan numerosos intercesores, que en tu generosidad nos concedas la deseada abundancia de tu gracia. Por nuestro Señor Jesucristo…

LITURGIA DE LA PALABRA


Vi una muchedumbre tan grande, que nadie podía contarla. Eran individuos de todas las naciones y razas, de todos los pueblos y lenguas.



Del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan: 7, 2-4. 9-14

Yo, Juan, vi a un ángel que venía del oriente. Traía consigo el sello del Dios vivo y gritaba con voz poderosa a los cuatro ángeles encargados de hacer daño a la tierra y al mar. Les dijo: "¡No hagan daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que terminemos de marcar con el sello la frente de los servidores de nuestro Dios!".

Y pude oír el número de los que habían sido marcados: eran ciento cuarenta y cuatro mil, procedentes de todas las tribus de Israel.

Vi luego una muchedumbre tan grande, que nadie podía contarla. Eran individuos de todas las naciones y razas, de todos los pueblos y lenguas. Todos estaban de pie, delante del trono y del Cordero; iban vestidos con una túnica blanca; llevaban palmas en las manos y exclamaban con voz poderosa: "La salvación viene de nuestro Dios, que está sentado en el trono, y del Cordero".

Reflexión 304: La verdad en todas las cosas

 



Reflexiones diarias sobre la Divina Misericordia
365 días con santa Faustina

Reflexión 304: La verdad en todas las cosas

Video

¿Debemos temer la verdad? Por un lado, la verdad puede meternos en problemas. Mire, por ejemplo, a los Mártires. Son testigos de la verdad con el derramamiento de su sangre. Se "metieron en problemas" sólo en el sentido de que su testimonio de la verdad provocó su persecución. Pero a los ojos de Dios, esto no es ningún problema. Es un acto de gran amor y honestidad, coraje y determinación. Eligieron la verdad sobre la vida misma. Aunque lo más probable es que no seas llamado a ser testigo de la verdad hasta el punto de derramar literalmente tu sangre, la resolución en tu mente y corazón debe ser la misma que la de los grandes mártires. Debemos tener una adhesión inquebrantable a lo que está en la Mente de Dios y nunca debemos dudar en decir esa verdad con convicción. Por supuesto, la prudencia es una virtud rectora que nos permitirá discernir qué decir y cuándo.Diario # 1482).

Reflexione sobre la firmeza con que se une a Aquel que es la Verdad Eterna. ¿Somete su mente a todo lo que Dios dice y lo cree con cada fibra de su ser? Ésta debe ser su firme resolución. Reflexione también sobre cómo les dice la verdad a los demás. A veces podemos sentirnos tentados a hablar sin prudencia, que en última instancia es falta de caridad. Pero en otras ocasiones podemos ceder al miedo ante alguna oposición a la verdad que es también una falta de caridad. Busque vivir en la Verdad de Dios y proclamarla con Su Corazón misericordioso y el Señor aceptará esta resolución suya como un sacrificio de santo martirio.

Señor, oro por coraje y prudencia a medida que avanzo por la vida buscando vivir y proclamar todo lo que dices. Que nunca ceda al miedo o la cobardía cuando me opongo o me desafían. En cambio, dame la resolución pacífica de ser un gran testigo de Ti en todas las cosas. Jesús, en Ti confío.



Amor a Dios y al prójimo 31 de octubre de 2021 Trigésimo primer domingo del tiempo ordinario, año B

 




Reflexiones diarias católicas
¡Mi vida católica!

Amor a Dios y al prójimo
31 de octubre de 2021
Trigésimo primer domingo del tiempo ordinario, año B
Lecturas de hoy

“El segundo es este: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que estos ”. San Marcos 12:31

El primer y más grande Mandamiento es amar a Dios con todo tu corazón, alma, mente y fuerzas. Pero Jesús continúa dándonos el segundo mandamiento más importante. "Amarás a tu prójimo como a ti mismo."

En primer lugar, es importante señalar que amar a Dios con todas tus fuerzas es el mandamiento más grande, en parte, porque a menos que lo hagas, no puedes amar también a tu prójimo. El amor al prójimo depende de si amas a Dios con todo tu ser. Solo cuando amas a Dios, ese amor puede desbordarse en otras relaciones.

Cuando miras el amor al prójimo como un efecto del desbordamiento de tu amor por Dios, este segundo mandamiento adquiere un significado más claro. Jesús no solo dice amar a tu prójimo, dice que lo hagas "como a ti mismo". Entonces, ¿cómo te amas a ti mismo? Lo haces principalmente cumpliendo el Primer Mandamiento del amor de Dios.

Amar a Dios con todo tu ser es, de hecho, la mejor manera de amarte también a ti mismo. ¿Por qué? Porque fuimos hechos para el amor y la comunión con Dios. Amar a Dios no es un favor extra que le hacemos a Dios; más bien, es una forma de satisfacer el significado más profundo de quiénes somos. Estamos hechos para el amor y estamos hechos para Dios. Por lo tanto, amar a Dios es la mejor manera de amarte a ti mismo.

Desde este punto de partida, pasamos a una mejor comprensión de cómo estamos llamados a amar a nuestro prójimo. Si la satisfacción de amarse a sí mismo se encuentra amando a Dios y estando en una relación íntima de amor con Dios, entonces amas a tu prójimo como a ti mismo al atraer a tu prójimo a una relación de amor con Dios también. No hay nada que puedas hacer que sea más amoroso por los demás que actuar como un puente entre ellos y Dios. Y cuanto más directamente actúes como ese puente, mayor será tu amor por ellos y más completamente cumplirás este Mandamiento.

Reflexione hoy sobre las formas en que actúa como puente de amor entre Dios y los demás. Reconozca esto como su absoluto deber, privilegio y honor. Comprométete con un amor incondicional por Dios y permite que ese amor se desborde y se derrame sobre todos aquellos con quienes te encuentras todos los días. El amor es contagioso y debe consumir todo lo que eres y todo lo que haces.

Señor, deseo amarte con todo mi ser. Aumenta mi amor por Ti y permite que ese amor se desborde en todas las relaciones que tengo en la vida. Que el amor sea la única misión de mi vida. Jesús, en Ti confío.