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Reflexión 361: Sacrificio y oración
Aunque esto sea difícil de entender y de creer, el sacrificio interior unido a la oración pura hace un bien increíble para el anuncio del Evangelio en todo el mundo. De hecho, si los misioneros no tuvieran el poder de las almas santas que ofrecían diariamente sacrificios interiores y oraciones, sus esfuerzos tendrían poco efecto. La gracia de Dios es lo que mueve a las personas y esta gracia se gana especialmente a través de almas cuyos sacrificios son: silenciosos, escondidos, impregnados de amor e imbuidos de oración. (Ver Diario # 1767).
Reflexione sobre el hecho de que tiene mucho que ofrecer para la edificación del Reino de Dios a través de sus sacrificios personales e interiores. Al elegir aquellas cosas que son difíciles e incluso repulsivas para sus sentimientos, puede ofrecer una poderosa intercesión por el bien de la Iglesia. Hay una increíble cantidad de poder espiritual en este tipo de sacrificio. Dios elige algunas almas especiales para ofrecer este sacrificio de manera profunda, pero todos deben esforzarse por hacerlo. Reflexiona sobre las oportunidades que tienes ahora para abrazar alguna lucha interior. Al abrazarlo y ofrecerlo a Dios, transformas este sufrimiento en gracia que la oración y el trabajo por sí solos nunca podrían lograr.
Señor, ayúdame a comprender el poder de mis sacrificios interiores. Ayúdame a saber que escogerte y aceptar mis sufrimientos por Ti se convierte en una poderosa fuente de gracia en este mundo. Cuando esto me confunda, querido Señor, ayúdame a poner mis ojos en Ti y a conocer Tu Santísima Voluntad. Jesús, en Ti confío.
Aunque esto sea difícil de entender y de creer, el sacrificio interior unido a la oración pura hace un bien increíble para el anuncio del Evangelio en todo el mundo. De hecho, si los misioneros no tuvieran el poder de las almas santas que ofrecían diariamente sacrificios interiores y oraciones, sus esfuerzos tendrían poco efecto. La gracia de Dios es lo que mueve a las personas y esta gracia se gana especialmente a través de almas cuyos sacrificios son: silenciosos, escondidos, impregnados de amor e imbuidos de oración. (Ver Diario # 1767).
Reflexione sobre el hecho de que tiene mucho que ofrecer para la edificación del Reino de Dios a través de sus sacrificios personales e interiores. Al elegir aquellas cosas que son difíciles e incluso repulsivas para sus sentimientos, puede ofrecer una poderosa intercesión por el bien de la Iglesia. Hay una increíble cantidad de poder espiritual en este tipo de sacrificio. Dios elige algunas almas especiales para ofrecer este sacrificio de manera profunda, pero todos deben esforzarse por hacerlo. Reflexiona sobre las oportunidades que tienes ahora para abrazar alguna lucha interior. Al abrazarlo y ofrecerlo a Dios, transformas este sufrimiento en gracia que la oración y el trabajo por sí solos nunca podrían lograr.
Señor, ayúdame a comprender el poder de mis sacrificios interiores. Ayúdame a saber que escogerte y aceptar mis sufrimientos por Ti se convierte en una poderosa fuente de gracia en este mundo. Cuando esto me confunda, querido Señor, ayúdame a poner mis ojos en Ti y a conocer Tu Santísima Voluntad. Jesús, en Ti confío.
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