Papa Francisco: Dios habla a través de los sueños

Papa Francisco: Pidan a San José que los ayude a obtener la gracia de saber soñar buscando siempre la voluntad de Dios en los sueños  


"Si bien San José era un hombre práctico y realista, tenía suficiente fe para estar abierto a Dios hablando a través de los sueños", así lo afirmó el Papa Francisco durante su homilía en la misa en la Casa de Santa Marta.

En un cojín bien arreglado que se colocó en la base del altar donde el Papa Francisco celebró la Misa, había cuatro grandes adornos navideños hechos para el Papa por niños eslovacos que tienen discapacidades. Al respecto de esto, el Papa Francisco expresó su alegría:

"Estos niños lo hicieron con sus propias manos... Pensé que al Señor Jesús le gustaría tenerlos aquí".

La lectura del Evangelio de Mateo (Mateo 1,18-25) contó cómo José, siendo un hombre justo, quiso romper tranquilamente su relación con María cuando descubrió que estaba embarazada, pero en un sueño un Ángel del Señor le dijo que "el niño había sido concebido a través de El Espíritu Santo y él debía tomar a María como su esposa".


Dios habla a través de los sueños.
Los evangelios relatan que María dijo que sí a Dios, pero con José, la historia simplemente dice que hizo lo que el ángel del Señor le había ordenado.

Si bien muchos sueños son solo el habla subconsciente del soñador, otros sueños pueden ser un lugar privilegiado para buscar la verdad porque allí no podemos defendernos contra la verdad. Vienen y Dios habla a través de los sueños.

José era un hombre de sueños, pero no un soñador. No era abstracto y no tenía su cabeza en las nubes... José tenía los pies en el suelo. Pero tenía la mente abierta

Que San José les ayude a conseguir la gracia de saber Soñar.
Pidan a San José que los ayude a obtener la gracia de saber soñar buscando siempre la voluntad de Dios en los sueños y también la gracia de acompañar a otros en silencio, sin charlas.

En los Evangelios no se registra nada de lo que San José dijo, pero estamos seguros de que San José ayudó a Jesús a crecer y desarrollarse. Buscó un lugar donde naciera el niño. Lo cuidó, lo ayudó a crecer y le enseñó una habilidad...en silencio.

San José nunca actuó como si Jesús fuera "suyo"... Silenciosamente lo dejó crecer. Lo dejó crecer: esta idea podría ayudarnos enormemente, a quienes por naturaleza siempre queremos meter la nariz en todo, especialmente en las vidas de los demás.

A veces, los padres ven a sus hijos hacer algo que desearían no haber hecho, pero se callan y esperan el momento adecuado para hablar... No gritan de inmediato. No, esperan la oportunidad de decir algo que los lleve a crecer

Dios también es así, Es paciente y permite que sus hijos aprendan.