P. Embarazo y aborto peligrosos

 

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P. Embarazo y aborto peligrosos

P. Una mujer que dio a luz a través de una cirugía justo dentro de un año queda embarazada en contra de las instrucciones de los médicos, ya que es un gran riesgo para ella. Bajo esta circunstancia, ¿permite la Iglesia el aborto?

R. Esta es una pregunta muy real de la vida. Es “vida real” en el sentido de que ciertamente es algo con lo que la gente se encuentra y algo que trae consigo preguntas serias. Gracias por preguntar.

Comenzamos reconociendo el miedo y la ansiedad que están naturalmente presentes cuando una madre está embarazada con un embarazo de alto riesgo. Y, en su escenario, está claro que ya es madre dando a luz hace menos de un año. Ahora está nuevamente embarazada y los médicos hacen la valoración médica de que su vida corre peligro con este nuevo embarazo. Es bastante comprensible que esta situación provoque mucho temor y preocupación legítimos para esta madre y su familia.

Para entender bien esta cuestión tenemos que ver claramente lo que está en juego. Primero, tenemos la vida de la madre. Su vida, sin duda, es de gran valor y se debe hacer todo lo posible para ayudar a mantenerla saludable. También tenemos que considerar un segundo hecho esencial  . Por “esencial” queremos decir que este segundo hecho no puede ser ignorado. Y ese hecho es que estamos hablando de dos vidas, no de una sola.

Una vez que tiene lugar el embarazo, se presenta nueva vida humana. Esto significa que un nuevo niño es creado por Dios y vive en el vientre de la madre. Aunque este es un hecho obvio, a menudo no se considera completamente al hacer esta pregunta. Entonces, por difícil que sea verlo de esta manera, también se debe hacer la siguiente pregunta: “¿La vida de quién es más importante? ¿La de la madre? ¿O la del niño recién concebido? Bueno, la verdad sea dicha, no hay respuesta a esa pregunta porque ninguno es más importante que el otro. Cada vida es absolutamente sagrada y de valor infinito.

Algunos han sugerido que la vida de la madre es más importante que el niño recién concebido porque la madre ya es madre y otro niño depende de ella. Si bien es cierto que sus responsabilidades en la vida son obviamente mayores, dado que un niño en el vientre no tiene responsabilidades, sería un error equiparar responsabilidad con valor. La vida tiene un valor infinito simplemente porque es vida, y eso es todo.

Entonces, ¿cómo respondemos a la pregunta? La respuesta es que el aborto siempre está mal. El objetivo debe ser hacer todo lo posible para ayudar a la madre a que el niño llegue a término. Sin embargo, hay algunas opciones. Por ejemplo, un parto prematuro podría tener lugar aunque suponga un cierto riesgo para el niño. Se debe tener cuidado para que el riesgo no sea demasiado grande, pero cierto riesgo es razonable.

Esto es especialmente cierto cuando se concluye que si la madre muriera, el niño también moriría. En ese caso, cuando un médico determina que el riesgo tanto para la madre como para el niño es tan grande que es casi inevitable, casi sería necesario un parto prematuro incluso si existe un gran riesgo para el niño. En este caso la intención ciertamente no es el aborto, la intención y el objetivo es salvar la vida tanto de la madre como del niño.

Una situación específica a considerar es un embarazo tubárico. Esto es cuando se concibe un niño y se adhiere a la trompa de Falopio en lugar de a la pared uterina. En este caso, el resultado médico es bastante seguro. El niño no sobrevivirá y lo más probable es que la madre muera de hemorragia interna. Este es un caso en el que muchos teólogos morales han aplicado un principio moral llamado “el principio del doble efecto”. “Doble efecto” significa que se pretende una cosa y otra no. Específicamente, muchos han argumentado que está permitido extraer la parte de la trompa de Falopio que está rota o que pronto se romperá, aunque saben que esto también eliminará el embrión humano. El aborto directo no es la intención en este caso. Para obtener más información sobre esto, puede encontrar útil este artículo:Católicos Unidos por el Fatih.

Si usted o alguien que conoce se encuentra en esta situación, comuníquese con su párroco para obtener su consejo. Cada caso traerá consigo circunstancias únicas por lo que es fundamental evaluar su situación y todos los factores involucrados.