Reflexiones Católicas Diarias
Mi vida católica!
Victoria final!
28 de julio de 2020
Martes de la decimoséptima semana en
lecturas de tiempo ordinario para hoy
“Así como las malezas se recolectan y se queman con fuego, así será al final de la era. El Hijo del Hombre enviará a sus ángeles, y ellos recogerán de su Reino a todos los que hacen pecar a otros y a todos los malvados. Los arrojarán al horno de fuego, donde habrá gemidos y rechinar de dientes. Entonces los justos brillarán como el sol en el Reino de su Padre. Quien tenga oídos debe oír. Mateo 13: 40-43
¡Imagina ese día! Imagina si ese día fuera mañana. Si Jesús regresara mañana y ejecutara toda la justicia sobre el mundo, ¿te preocuparía alguna injusticia hoy? Probablemente no. En cambio, habría una capacidad de sentarse y estar en paz sabiendo que se acercaba la justicia.
Bueno, ese día llegará pronto. Eso es lo que dijo Jesús. De acuerdo, eso se dijo hace casi 2.000 años, pero para Él todavía es pronto. El tiempo, para Dios, adquiere una perspectiva eterna. Por lo tanto, el fin del mundo es tan real para Dios hoy como lo es cuando realmente sucede.
Es bueno tener esto en cuenta cuando vemos que el mal prospera y crece la injusticia. Es muy fácil enojarse y enojarse por las victorias diarias del maligno. Pero no temas y no te preocupes. Dios realmente tiene el control. Él sabe lo que está haciendo y tendrá la gloriosa victoria final sobre todas las cosas.
Así que piensa en eso. Cuando Jesús regrese en toda su gloria y arregle todo, ¿importará el mal que ahora soportamos? De hecho, desde la perspectiva eterna, el mal que soportamos solo debería servir para darnos resistencia santa. Tiene todo el potencial para ser usado por Dios para manifestar su gracia y fortaleza en nuestras vidas.
Reflexione, hoy, sobre la perspectiva eterna. Si persevera en todas las cosas ahora, y se esfuerza por hacerlo con paciencia y gracia, puede estar seguro de que toda la lucha y todo lo que tenga que soportar valdrá la pena al final. En el nuevo y glorioso Reino de Dios estarás en paz, y la alegría llenará tu vida para siempre. Todo mal se corregirá y Dios saldrá victorioso. Asegúrese de tener "oídos para escuchar" esta verdad y aferrarse a ella a través de todas las cosas.
Señor, ayúdame a mantener mis ojos en ti y en tu victoria final. Ayúdame a esperar pacientemente tu victoria final y a soportar el mal de este mundo con la gracia y la fuerza que me das. Que nunca olvide la promesa final de que me has hablado. Jesús, confío en ti.
No hay comentarios. :
Publicar un comentario