sábado, 26 de septiembre de 2020

Reflexión 270: Los detalles de la voluntad de Dios

 



¿Estás dispuesto a aceptar la Voluntad de Dios en tu vida? Si es así, debe estar abierto a todos los detalles. La Voluntad de Dios no es una generalización grandiosa. Elegir Su Voluntad no es simplemente una cuestión de decir que eliges seguirlo a grandes rasgos. Más bien, elegir Su Voluntad es decir “Sí” una y otra vez a cada pequeño susurro y cada inspiración que el Señor da. Se trata de desarrollar el hábito de estar atento a las pequeñas formas en que Dios te habla. La misericordia también está en los detalles, ya que la Misericordia y la Voluntad de Dios son una y la misma. Estar abierto a la Misericordia de Dios significa que te das cuenta de que Dios quiere entrar en las partes más “insignificantes” de tu vida. La verdad es que nada en tu vida es insignificante para nuestro Señor. Por lo tanto, debes darte cuenta de que esas partes que percibes como insignificantes le son muy queridas. Su cuidado e inquietud llega a todas partes y se ofrece en cada momento a cada detalle que conforma la aparente complejidad de su vida. Cuando te des cuenta de esto, querrás, a su vez, buscar los finos detalles de Su santa Voluntad. Querrás servirle en todas las formas posibles y, al hacerlo, vivirás en Su misericordiosa Voluntad (VerDiario # 1356).

Reflexione hoy sobre las pequeñas cosas de su vida. ¿Qué es lo que, a primera vista, parece estar lejos de la Voluntad de Dios? Saber que cada pequeño detalle de su vida es importante para nuestro Señor y siempre está a su vista, le dará una nueva perspectiva. Mientras reflexiona sobre las pequeñas cosas que componen su vida, entréguelas a la Voluntad de Dios e invite a Su misericordia a esos detalles. Hacerlo te llevará por el camino de la verdadera felicidad.

Señor, te ofrezco, este día, cada parte de mi vida. Gracias por tu perfecto amor e interés. Ayúdame a amarte en los detalles, abrazando Tu perfecta Voluntad en todas las cosas. Que no me canse nunca de dejar entrar a Tu Misericordia para producir los más pequeños actos de amor. Jesús, en Ti confío.



No hay comentarios. :

Publicar un comentario