lunes, 14 de junio de 2021

Reflexión 165: La contrición perfecta

 



Reflexiones diarias sobre la Divina Misericordia
365 días con santa Faustina

Reflexión 165: La contrición perfecta


Cuando nos damos cuenta de nuestros pecados, podemos tener varias reacciones. Podemos permanecer indiferentes o arrepentirnos por temor a la justicia de Dios. Pero la respuesta ideal es volverse a Dios con amor y tener verdadero dolor como resultado de ese amor. Si tenemos un amor ardiente por Dios, estaremos atentos incluso al pecado más pequeño que carguemos. Y cada pecado que veamos, desearemos deshacernos de él. Este amor ardiente nos lleva a un acto de perfecta contrición mediante el cual nuestro amor a Dios purifica la más pequeña partícula de pecado en nuestras almas (Ver Diario # 852).

¿Ves tu pecado? Si es así, ¿cómo reacciona? La forma en que reaccionas a tu pecado es una buena medida de tu amor por Dios y tu confianza en Su Divina Misericordia. Si reaccionas con indiferencia, falta tu amor. Si reaccionas con culpa y miedo al castigo, te falta amor. Pero si reaccionas con confianza en Dios y un total abandono a Su Divina Misericordia, entonces el amor que tienes en tu vida se convertirá en la fuente de aún más Misericordia derramada sobre ti. Piense honestamente en su reacción a su pecado y ore para que el Señor lo bendiga con tal abundancia de amor por Él que se regocijará al ver aquello de lo que necesita arrepentirse.

Señor, dame un amor tan perfecto por Ti que me doy cuenta de cada pecado en mi alma que te desagrada. Al ver mis pecados, incluso el más pequeño de los pecados, dame la gracia de correr a Ti con confianza para que Tu Misericordia me purifique y me santifique. Te amo mi querido Señor. Ayúdame a amarte más. Jesús, en Ti confío.





No hay comentarios. :

Publicar un comentario