Reflexión 164: Anhelo por las almas de los pecadores

 

Reflexiones diarias sobre la Divina Misericordia

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Reflexión 164: Anhelo por las almas de los pecadores

Cuando ve a alguien con pecado manifiesto, ¿cuál es su reacción? Mucha gente reacciona con desdén y juicio severo. Cuando alguien infringe la ley, lo condenamos duramente. Cuando alguien lleva un estilo de vida inmoral, lo menospreciamos. Muy a menudo, nuestra actitud hacia el pecador es despiadada. Esto es un problema. Es cierto que debemos ver el pecado por lo que es y trabajar para oponernos a él, especialmente cuando afecta a otros. Pero siempre debemos tener en nuestro corazón un profundo amor por los pecadores. Debemos tener un anhelo por su arrepentimiento y siempre ver la dignidad innata que tienen como personas (Ver Diario # 842).

¿Cuál es tu reacción hacia el pecador? Sea honesto y observe primero cómo reacciona interiormente. Todos somos pecadores. Algunos pecados son más manifiestos que otros y algunos viven vidas pecaminosas de manera abierta y obstinada. Pero, ¿debemos permitirnos condenarlos? Debemos juzgar una acción objetiva por lo que es, pero la persona nunca debe ser juzgada. Esto depende únicamente de Dios. Reflexione sobre su actitud hacia aquellos con pecados más manifiestos. Ore para que, en lugar de volverse severo y crítico, anhele su conversión y los ame de todo corazón a pesar de sus acciones.

Señor, dame un corazón compasivo por los pecadores. Ayúdame a amarlos con un amor ardiente y a suspender mis tentaciones de juzgar. Que pueda anhelar a todas las personas con Tu Corazón de Misericordia deseando su santidad. Que yo también sea consciente de mi propia pecaminosidad y busque diariamente Tu Corazón misericordioso. Jesús, en Ti confío.