365 días con santa Faustina
Reflexión 104: La Coronilla de la Misericordia
La oración es esencial para nuestro caminar cristiano. Cuando ora, es bueno hablar con el corazón, derramando su alma ante Dios. Pero la oración también debe seguir su fe y todo lo que sabe de Dios. Debe reflejar su verdadero conocimiento de Dios e invocar Su misericordia. La Coronilla de la Divina Misericordia es una de esas oraciones que refleja perfectamente su fe en la Misericordia de Dios. (Vea el Diario # 475-476).
¿Rezas? ¿Oras todos los días? ¿Está su oración centrada en la fe y la verdad, lo que le permite invocar continuamente la misericordia de Dios? Si no reza la Coronilla a la Divina Misericordia, pruébela todos los días durante una semana. Sea fiel y confíe en la fe revelada en las palabras pronunciadas. Verás abrirse las puertas de la Misericordia de Dios si te comprometes con esta oración.
Padre Eterno, te ofrezco el Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu amado Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, en expiación por nuestros pecados y los del mundo entero. Por Su dolorosa Pasión, ten piedad de nosotros y del mundo entero. Jesús, en Ti confío.
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