domingo, 20 de septiembre de 2020

Reflexión 264: Un retiro con Jesús




¿Has hecho alguna vez un retiro? Algunos tienen el privilegio de tomarse un tiempo alejados del ajetreo de la vida para pasar más tiempo escuchando a nuestro Señor y estando en Su presencia misericordiosa. A otros les resulta difícil encontrar siquiera un día para entrar en un retiro así. Independientemente de si tiene o no esta oportunidad, sepa que necesita tiempo a solas con Jesús. No es posible hablar con Él solo durante su día ajetreado y mantener una relación adecuada con Él. La profundidad de la relación deseada por Jesús requiere un tiempo reservado únicamente para Él. Busque estas oportunidades y no las desaproveche. Es a través de momentos de oración y reflexión prolongadas que la vida se aclara y se manifiesta la Voluntad de Dios (Ver Diario # 1326-1327).

¿Cuándo fue la última vez que pasó mucho tiempo a solas con nuestro Señor? Quizás fue solo una hora en la capilla o en tu habitación, o quizás fue más tiempo. Piense en cuánto tiempo le dedica. A menudo podemos encontrar mucho tiempo para ver una película, ir de compras o participar en alguna otra actividad recreativa. La verdad es que si hacemos del tiempo a solas con nuestro Señor una prioridad en la vida, sucederá. Encontraremos el tiempo y nuestro tiempo con Él será abundantemente fructífero. Reflexiona sobre el nivel de prioridad que le das a estos momentos de tranquila reflexión con nuestro Señor y vuelve a comprometerte a hacer de ellos la parte más importante de tu vida. Si lo hace, todo lo demás encajará a medida que se derrame Su Misericordia.

Señor, deseo convertirte en la prioridad número uno en mi vida. Deseo tener tiempo para ti a diario y encontrar un período prolongado de tiempo para ti con regularidad. Ayúdame a tener la voluntad de hacer esto para que pueda disfrutar de Tu presencia y permitirte resolver las dificultades que enfrento en la vida. Jesús, en Ti confío.

 

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