sábado, 25 de julio de 2020

Cáliz de cristo


Encabezado de Pascua Correo electrónico CDR


Reflexiones Católicas Diarias
¡Mi vida católica!


Cáliz de cristo
Sábado 25 de julio de 2020

Fiesta de Santiago Apóstol

Lecturas para hoy



"¿Puedes beber el cáliz que voy a beber?" Le dijeron: "Podemos". Él respondió: "Mi cáliz ciertamente beberás, pero para sentarte a mi derecha y a mi izquierda, esto no es mío, sino para aquellos para quienes ha sido preparado por mi Padre". Mateo 20: 22b-23

Esta fue una reprensión muy gentil por parte de Jesús. La madre de James y John le pidió un favor a Jesús. Ella quería que sus hijos se sentaran a Su derecha e izquierda en Su Reino. Jesús dijo suavemente: "No sabes lo que estás preguntando" y luego pasó a hablar el pasaje anterior.

"No sabes lo que estás preguntando". ¿Por qué Jesús dijo esto? En parte, es porque el camino hacia la gloria, es decir, el camino para sentarse a Su derecha e izquierda en el Reino, es el camino de la Cruz. Es el camino de abrazar libremente los sufrimientos de la Cruz con Jesús. No es posible entrar en Su gloria sin caminar primero con Él a través de Su muerte.

Entonces les pregunta a estos apóstoles: "¿Puedes beber el cáliz que yo voy a beber?" En otras palabras, ¿puedes abrazar mi Cruz? ¿Puedes abrazar mi sufrimiento? ¿Puedes caminar conmigo a través de mi último sacrificio y participar en ese sacrificio ofreciendo también tus vidas?

Los apóstoles afirman que pueden y, de hecho, eventualmente siguen a Jesús en su sacrificio entregándose por completo a los demás. 

¿Puedes beber ese cáliz? ¿Puedes aceptar voluntariamente la Cruz en tu vida? ¿Puedes soportar las dificultades, los sacrificios y, tal vez, incluso la persecución por ser un seguidor de Jesús? ¿Puedes caminar con Él a través de Su sufrimiento? Si la respuesta es "Sí", entonces compartirás Su gloria. Quizás esa gloria no será sentarse a Su derecha e izquierda, sino que será una gloria más allá de tu imaginación más salvaje. Vale la pena y es una invitación que nunca te arrepentirás de aceptar.

Señor, deseo beber el cáliz que bebiste. Deseo recibir Tu Precioso Cuerpo y Sangre y en esa recepción recibir la fuerza y ​​la gracia que necesito para seguirte en Tus sufrimientos. Mientras te sigo en tus sufrimientos, ayúdame también a compartir tu gloria. Jesús, confío en ti.







  

No hay comentarios. :

Publicar un comentario