Reflexiones diarias católicas
¡Mi vida católica!
La fe de San José
Sábado, 18 de diciembre de 2021 Lecturas del día de la
semana de Adviento
para hoy
O Antífonas de Adviento
17-23 de diciembre
El ángel del Señor se le apareció a José en un sueño y le dijo: “José, hijo de David, no temas llevar a tu esposa María a tu casa. Porque es por el Espíritu Santo que este niño ha sido concebido en ella. Ella dará a luz un hijo y le pondrás por nombre Jesús, porque salvará a su pueblo de sus pecados ". Mateo 1: 20b – 21
San José es un hombre del que sabemos poco, pero pensamos en la importancia de su papel en la historia de la salvación. Se le confió al Hijo de Dios como su pequeño hijo. Al principio, estaba confundido acerca de cómo María pudo haber quedado embarazada, pero al recibir las palabras del ángel en un sueño, aceptó a este Niño como suyo y lo cuidó con el amor de un padre.
Es significativo notar que San José abrazó al Niño Jesús por un sueño. ¿Pero fue solo un sueño? Todos tenemos muchos sueños y algunos de ellos son extraños y sin sentido. Entonces, ¿por qué San José confió en la autenticidad de este sueño?
La respuesta a esta pregunta es bastante sencilla. Aunque el sueño que tuvo fue solo eso, un sueño, también fue acompañado por el don de la fe. José sabía, con una certeza más allá de la razón humana, que la voz de Dios le había hablado y respondió con fe generosa.
Puede que no tengamos sueños a través de los cuales Dios nos habla en forma de ángel, pero Dios nos habla todo el día. Él habla directamente a nuestras mentes y corazones, y también a través del cuidado y la mediación de innumerables huestes de ángeles de diversas maneras. Los ángeles de Dios nos traen constantemente mensajes e inspiraciones divinas. La pregunta es si estamos escuchando o no.
Escuchar la voz de Dios, a través de la mediación de los ángeles, no se trata de que veamos o escuchemos a los ángeles hablar, literalmente. Más bien, se trata de discernir este lenguaje de amor que se nos habla y llamarnos a la fe.
Escuche en el silencio de su corazón, este día, y permítase seguir el glorioso testimonio de San José cuando respondió a la voluntad de nuestro Señor con perfecta fe y confianza.
Señor, anhelo escuchar Tu dulce voz. Anhelo saber todo lo que me mandas y todo lo que me inspiras a abrazar en la vida. Dame la gracia que necesito, para seguir cada inspiración en la vida para que pueda cumplir Tu perfecta y santa voluntad. Jesús, en Ti confío.
¡Mi vida católica!
La fe de San José
Sábado, 18 de diciembre de 2021 Lecturas del día de la
semana de Adviento
para hoy
O Antífonas de Adviento
17-23 de diciembre
El ángel del Señor se le apareció a José en un sueño y le dijo: “José, hijo de David, no temas llevar a tu esposa María a tu casa. Porque es por el Espíritu Santo que este niño ha sido concebido en ella. Ella dará a luz un hijo y le pondrás por nombre Jesús, porque salvará a su pueblo de sus pecados ". Mateo 1: 20b – 21
San José es un hombre del que sabemos poco, pero pensamos en la importancia de su papel en la historia de la salvación. Se le confió al Hijo de Dios como su pequeño hijo. Al principio, estaba confundido acerca de cómo María pudo haber quedado embarazada, pero al recibir las palabras del ángel en un sueño, aceptó a este Niño como suyo y lo cuidó con el amor de un padre.
Es significativo notar que San José abrazó al Niño Jesús por un sueño. ¿Pero fue solo un sueño? Todos tenemos muchos sueños y algunos de ellos son extraños y sin sentido. Entonces, ¿por qué San José confió en la autenticidad de este sueño?
La respuesta a esta pregunta es bastante sencilla. Aunque el sueño que tuvo fue solo eso, un sueño, también fue acompañado por el don de la fe. José sabía, con una certeza más allá de la razón humana, que la voz de Dios le había hablado y respondió con fe generosa.
Puede que no tengamos sueños a través de los cuales Dios nos habla en forma de ángel, pero Dios nos habla todo el día. Él habla directamente a nuestras mentes y corazones, y también a través del cuidado y la mediación de innumerables huestes de ángeles de diversas maneras. Los ángeles de Dios nos traen constantemente mensajes e inspiraciones divinas. La pregunta es si estamos escuchando o no.
Escuchar la voz de Dios, a través de la mediación de los ángeles, no se trata de que veamos o escuchemos a los ángeles hablar, literalmente. Más bien, se trata de discernir este lenguaje de amor que se nos habla y llamarnos a la fe.
Escuche en el silencio de su corazón, este día, y permítase seguir el glorioso testimonio de San José cuando respondió a la voluntad de nuestro Señor con perfecta fe y confianza.
Señor, anhelo escuchar Tu dulce voz. Anhelo saber todo lo que me mandas y todo lo que me inspiras a abrazar en la vida. Dame la gracia que necesito, para seguir cada inspiración en la vida para que pueda cumplir Tu perfecta y santa voluntad. Jesús, en Ti confío.
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