martes, 19 de julio de 2022

Nuestra Santísima Madre 19 de julio de 2022 Martes de la XVI semana del Tiempo ordinario

 




Reflexiones Católicas Diarias
¡Mi vida católica!

Nuestra Santísima Madre
19 de julio de 2022
Martes de la XVI semana del Tiempo ordinario
Lecturas para hoy

“¿Quién es mi madre? ¿Quiénes son mis hermanos? Y extendiendo su mano hacia sus discípulos, dijo: “Aquí están mi madre y mis hermanos. Porque todo el que hace la voluntad de mi Padre celestial es mi hermano, mi hermana y mi madre”. Mateo 12:48-50

Este pasaje ofrece una maravillosa oportunidad para hablar de la Santísima Virgen María. Algunos de los que leen este pasaje caen en la trampa de pensar que Jesús se estaba distanciando de alguna manera de Su madre. Es como si concluyeran que Su declaración ignora el papel especial de ella en Su vida. Nada mas lejos de la verdad.

Lo cierto es que su declaración reafirma más que nada su maternidad. ¿Por qué? Porque Él está hablando de cómo uno llega a ser un verdadero miembro de Su familia. Y eso sucede cuando uno “hace la voluntad de mi Padre celestial”.

Piensa en esa línea. ¿Quién cumplió mejor la voluntad del Padre Celestial? ¿Quién fue más obediente en todo que la Santísima Virgen? nadie lo era Actuó en perfecta obediencia a lo largo de su vida y, por tanto, cumple a la perfección el requisito de ser familia de Jesús.

Una cosa que debemos tomar de este pasaje es que la relación de nuestra Santísima Madre con Jesús se vivió en dos niveles. Primero, estaba la maternidad física con la que fue bendecida. Esta fue una gracia increíble y por la cual ella merece un gran honor. Pero su maternidad física no fue la razón principal de su bienaventuranza. La razón principal fue el resultado de su maternidad espiritual. Y esta maternidad espiritual se ve en este pasaje anterior. Es el resultado de su perfecto “Sí” a Dios en todas las cosas. Esta es la razón principal por la que debe ser honrada y llamada "bendita" para todas las edades.

Reflexiona, hoy, sobre el papel que nuestra Santísima Madre tiene en tu vida. Dios quiere que la honres, la imites y la hagas parte de tu familia. Él quiere que la recibas como tu madre espiritual en la medida en que eres miembro de la familia de Jesús. Si te esfuerzas por obedecer la voluntad del Padre en tu vida, también compartirás las bendiciones de Su vida. Una de esas grandes bendiciones es compartir a Su madre.

Glorioso Hijo de Dios e Hijo del Hombre, deseo ser obediente a Ti ya Tu voluntad en todas las cosas. Deseo abrazar el plan perfecto del Padre para mi vida. En esa voluntad, ayúdame a compartir Tu vida divina y convertirme en un miembro pleno de Tu familia. En esa familia, ayúdame a tomar a Tu madre como mía. Querida Madre, ruega por mí. Jesús, en Ti confío.





No hay comentarios. :

Publicar un comentario