SAN JOSÉ (sábado 19 marzo 2022)
De Corazón a corazón: 2Sam 7,4-5.12-14.16 (“Yo seré para él Padre”)/ Rom 4,13.16-18.22 (“Esperando contra toda esperanza, creyó”); Mt 1,16-24 (“No temas tomar contigo a María como esposa… Dará a luz un hijo y tú le pondrás por nombre Jesús”) / Lc 2,41-51 (“Tu padre y yo te buscábamos angustiados”)
Contemplación, vivencia, fraternidad, misión: La figura de San José parece siempre inédita, como si continuara realizándose en la historia de la Iglesia. El “silencio” de San José queda explicado por la “Palabra” de Dios: su vida era ya sólo para Jesús, el “Salvador”, nacido de María por obra del Espíritu Santo. Fue el hombre “justo”, siempre abierto a los nuevos planes de Dios. En su vida “callada” resonó la “Palabra” personal de Dios, Jesús, a quien José pudo siempre llamar “hijo” de un modo totalmente nuevo. El “esposo” de María compartió con ella los mismos avatares de Jesús (cfr. Mt 2,13) y así la custodió como Virgen madre del “Dios con nosotros” (Mt 1,23).
*Con María la Iglesia camina en comunión, abierta a las sorpresas del Espíritu Santo: María compartió siempre con José el gozo y el dolor de pertenecer exclusivamente a Jesús: “Tu padre y yo te buscábamos angustiados” (Lc 2,48).
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