viernes, 25 de marzo de 2022

Dios se hace hombre: nueve meses antes de Navidad viernes, 25 de marzo de 2022 Solemnidad de la Anunciación Consagración de Rusia y Ucrania al Inmaculado Corazón de María

 




Reflexiones Católicas Diarias
¡Mi vida católica!

Dios se hace hombre: nueve meses antes de Navidad
viernes, 25 de marzo de 2022

Solemnidad de la Anunciación

Consagración de Rusia y Ucrania al Inmaculado Corazón de María

Lecturas para hoy



Entonces el ángel le dijo: “No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios. He aquí, concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre Jesús. Este será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David su padre, y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su Reino no tendrá fin”. Lucas 1:30–33

¡Feliz Solemnidad! Celebramos hoy una de las fiestas más gloriosas del año. Hoy faltan nueve meses para Navidad y es el día en que celebramos que Dios Hijo asumió nuestra naturaleza humana en el seno de la Santísima Virgen. Es la celebración de la Encarnación de nuestro Señor.

Hay muchas cosas que celebrar hoy y muchas cosas por las que debemos estar eternamente agradecidos. En primer lugar, celebramos el hecho profundo de que Dios nos ama tanto que se hizo uno de nosotros. ¡El hecho de que Dios tomó nuestra naturaleza humana es digno de regocijo y celebración ilimitados! Si tan solo entendiéramos lo que esto significaba. Si tan solo pudiéramos entender los efectos de este increíble evento en la historia. El hecho de que Dios se haya hecho hombre en el seno de la Santísima Virgen es un don que escapa a nuestra comprensión. Es un regalo que eleva a la humanidad al reino de lo divino. Dios y el hombre están unidos en este glorioso evento y debemos estar eternamente agradecidos.

Vemos también en este acontecimiento el glorioso acto de perfecta sumisión a la voluntad de Dios. Vemos esto en la Santísima Madre misma. Es interesante notar que a nuestra Santísima Madre se le dijo que “concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo...” El ángel no le preguntó si estaba dispuesta, sino que le dijo lo que iba a suceder. ¿Por qué es ese el caso?

Sucedió así porque la Santísima Virgen dijo sí a Dios durante toda su vida. Nunca hubo un momento en que le dijera que no a Dios. Por eso, su perpetuo sí a Dios permitió al ángel Gabriel decirle que “concebirá”. En otras palabras, el ángel pudo decirle aquello a lo que ella ya había dicho sí en su vida.

Qué glorioso ejemplo es este. El “Sí” de nuestra Santísima Madre es un testimonio increíble para nosotros. Estamos llamados a decir diariamente sí a Dios. Y estamos llamados a decirle sí a Él incluso antes de saber lo que Él nos pide. Esta solemnidad nos brinda la oportunidad de decir una vez más “Sí” a la voluntad de Dios. No importa lo que Él te pida, la respuesta correcta es “Sí”.

Reflexiona, hoy, sobre tu propia invitación de Dios para decirle “Sí” a Él en todas las cosas. Vosotros, como nuestra Santísima Madre, estáis invitados a traer al mundo a nuestro Señor. No de la manera literal que ella lo hizo, pero tú estás llamado a ser un instrumento de Su continua Encarnación en nuestro mundo. Reflexione sobre cuán completamente responde a este llamado y arrodíllese hoy y diga "Sí" al plan que nuestro Señor tiene para su vida.

Señor, la respuesta es "¡Sí!" Sí, elijo tu voluntad divina. Sí, puedes hacer conmigo lo que quieras. Que mi “Sí” sea tan puro y santo como el de nuestra Santísima Madre. Hágase en mí según tu voluntad. Jesús, en Ti confío


No hay comentarios. :

Publicar un comentario