martes, 4 de diciembre de 2018

Papa Francisco: Si un sacerdote es gay y no puede ser célibe, debería irse

papa francisco con rostro muy serio enojado fruncido hablando



Papa Francisco: Los sacerdotes homosexuales deben ser instados a vivir el celibato en su totalidad, tratando de nunca crear escándalos  


"La Iglesia Católica ha tardado en reconocer la presencia de hombres homosexuales en el sacerdocio, por lo que los superiores deben tener cuidado al ayudar a los candidatos homosexuales a prepararse para una vida de celibato o abandonar el seminario", así lo expresó el Papa Francisco al Padre Claretiano Fernando Prado en el nuevo libro-entrevista: "The Strength of Vocation: La vida consagrada hoy".

Extractos de la entrevista del Papa Francisco con el Padre Prado, que se realizó en agosto, se publicaron en los periódicos el 1 de diciembre antes del lanzamiento del libro.

En el año 2013, el Papa Francisco le dijo a los periodistas:

"Si alguien es gay y está buscando al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarlo?"

Algunos medios de comunicación contrastaron esa observación con lo que el Papa Francisco le dijo al Padre Prado, aunque el Papa Francisco dejó en claro en la nueva entrevista que hablaba sobre la actividad homosexual entre sacerdotes y religiosos que hacen votos de castidad y celibato.


A continuación, algunas de las palalabras del Papa Francisco que se muestran en esta entrevista

No hay lugar para la homosexualidad en el sacerdocio.
La homosexualidad es un asunto muy serio, que debe ser discernido adecuadamente desde el principio con los candidatos, si es el caso. Debemos ser exigentes.

En la vida consagrada o en la del sacerdocio, no hay lugar para este tipo de afecto. Por esa razón, la iglesia recomienda que las personas con esta tendencia profundamente arraigada no sean aceptadas para el ministerio o la vida consagrada.

Los sacerdotes homosexuales, hombres y mujeres religiosos deben ser instados a vivir el celibato en su totalidad y, especialmente, a ser perfectamente responsables, tratando de nunca crear escándalos en sus comunidades o para el pueblo santo de Dios al vivir una doble vida. Sería mejor si dejaran el ministerio o la vida consagrada en lugar de vivir una doble vida.

La homosexualidad ha influido en la Iglesia.
Hoy en nuestras sociedades parece que la homosexualidad está de moda, y esta mentalidad también de alguna manera ha influido en la vida de la iglesia.

Los programas de formación religiosa y de seminario deben actualizarse para tomar el asunto en serio, ayudar a los seminaristas y aspirantes a entenderse a sí mismos y a las obligaciones del celibato, promover la madurez y permitir el discernimiento sobre si un candidato está listo y es capaz de vivir una vida de celibato.

No hay comentarios. :

Publicar un comentario