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Sábado semana cuarta Tiempo Ordinario (5 febrero 2022)
Publicado el viernes, 4 febrero 2022| Comentarios desactivadosen Sábado semana cuarta Tiempo Ordinario (5 febrero 2022)
De Corazón a corazón: 1Re 3,4-13 (Oración de Salomón: "Señor, concede a tu siervo un corazón dócil para aprender a hacer justicia a tu pueblo"); Mc 6,30-34(“Venid a un lugar solitario para descansar… Vio mucha gente y sintió compasión de ellos”)
Contemplación, vivencia, fraternidad, misión: Salomón había pedido “un corazón que entienda”. Jesús invita a sus discípulos al descanso y tamibén a la soledad contemplativa. Así podrán comprender el sentido misionero de su "compasión". La vida humana sólo se entiende desde los sentimientos de Cristo, “esposo”, consorte, hermano, protagonista, como si nos dijera: te acompaño, ¿quieres ser una página de mi biografía? Sus apóstoles están llamados a ser un reflejo de la compasión del Buen Pastor, mientras cuidan de las ovejas adquiridas con la sangre de la Nueva Alianza, sangre de Dios. Somos consortes de un Esposo que ha derramado su sangre por todos. Sin esta sintonía con Cristo crucificado y resucitado, hasta la sabiduría de Salomón puede fracasar.
*Con María la Iglesia camina en comunión, abierta a las sorpresas del Espíritu Santo: El Corazón compasivo de Jesús se formó en sintonía con el Corazón de su Madre y nuestra; al darnos a su Madre, nos invita a vivir en sintonía con ella. María “vivió el don recibido como una misión a cumplir, sintió la exigencia de abrir la puerta y salir de su casa, dio vida y cuerpo a la impaciencia con la que Dios quiere alcanzar a todos los hombres para salvarlos con su amor” (Papa Francisco, Eslovaquia, 15 septiembre 2021).
Sábado semana cuarta Tiempo Ordinario (5 febrero 2022)
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De Corazón a corazón: 1Re 3,4-13 (Oración de Salomón: "Señor, concede a tu siervo un corazón dócil para aprender a hacer justicia a tu pueblo"); Mc 6,30-34(“Venid a un lugar solitario para descansar… Vio mucha gente y sintió compasión de ellos”)
Contemplación, vivencia, fraternidad, misión: Salomón había pedido “un corazón que entienda”. Jesús invita a sus discípulos al descanso y tamibén a la soledad contemplativa. Así podrán comprender el sentido misionero de su "compasión". La vida humana sólo se entiende desde los sentimientos de Cristo, “esposo”, consorte, hermano, protagonista, como si nos dijera: te acompaño, ¿quieres ser una página de mi biografía? Sus apóstoles están llamados a ser un reflejo de la compasión del Buen Pastor, mientras cuidan de las ovejas adquiridas con la sangre de la Nueva Alianza, sangre de Dios. Somos consortes de un Esposo que ha derramado su sangre por todos. Sin esta sintonía con Cristo crucificado y resucitado, hasta la sabiduría de Salomón puede fracasar.
*Con María la Iglesia camina en comunión, abierta a las sorpresas del Espíritu Santo: El Corazón compasivo de Jesús se formó en sintonía con el Corazón de su Madre y nuestra; al darnos a su Madre, nos invita a vivir en sintonía con ella. María “vivió el don recibido como una misión a cumplir, sintió la exigencia de abrir la puerta y salir de su casa, dio vida y cuerpo a la impaciencia con la que Dios quiere alcanzar a todos los hombres para salvarlos con su amor” (Papa Francisco, Eslovaquia, 15 septiembre 2021).
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