Reflexión 220: El alma atormentada

Reflexiones diarias sobre la Divina Misericordia
65 días con santa Faustina

Reflexión 220: El alma atormentada


Algunas personas se sienten profundamente atormentadas en las profundidades de sus almas. A veces esto es causado por el pecado, a veces es causado por una Misericordia especial de Dios que le permite al alma experimentar los sufrimientos por los que pasó Jesús. Cualquiera que sea el caso, si encuentra algún tormento, en lo más profundo de su alma, sepa que tiene un derecho especial a la Misericordia de Dios. ¿Por qué tienes este "derecho" a la Misericordia? No porque te lo mereces; más bien, porque Dios desea otorgarlo. Cuanto mayor sea tu sufrimiento, mayor será tu derecho a la Misericordia de Dios. Por esa razón, no tengas miedo de correr hacia Dios en tu miseria y dolor. No temas a ninguna forma de rechazo de Dios. El alma que sufre es más querida por él que cualquier otra (Ver Diario # 1146).

El término "alma atormentada" es un lenguaje poderoso. Pero también es un lenguaje muy honesto, que describe la experiencia de muchas personas. Mucha gente siente este profundo tormento interior, especialmente a causa de sus pecados. Se sienten secos, solos y atrapados en este ciclo de dolor. Si eres tú de alguna manera, reflexiona sobre la verdad de que Dios te ofrece un derecho a Su Misericordia más que ningún otro. Él te elige como Su objeto especial de compasión y te prodiga más de lo que podrías pedir. Permítete crecer en confianza mientras buscas la Misericordia de Dios y permite que penetre en cada tormento que sientas, sin importar la causa, incluso si proviene de tu pecado.

Señor de la mayor compasión, ayúdame a saber con certeza que me amas y nunca me rechazarás. Creo en Tu Misericordia y confío en que deseas dispensarla en abundancia. Cuando me sienta perdido, confundido e incluso atormentado por mi pecado, ayúdame a recurrir a ti aún más, llamándote a cumplir tu promesa de amor. Jesús, confío en ti.